22 de noviembre de 2011
He intentado no imaginar que estoy destruida, he intentado cerrar los ojos y pensar que estoy bien... He luchado mil veces contra las ganas de llorar, contra ese vacío interno que se niega a irse ya. He intentado curar las heridas que ha dejado este amor, he hecho todo para no pensarte ni un día más a partir de hoy...
He dejado de llorarte aunque de verdad costó, no he dejado de intentarlo porque sé que en mi interior hay algo que me indica que me espera algo mejor. Casi he logrado olvidarte, todavía no del todo, porque aprendí que el tiempo a veces borra las cosas malas, o simplemente tranquiliza ese recuerdo insistente bien adentro, en tu interior. He vuelto a sonreír, simplemente porque me hace bien, regalarle una sonrisa al viento, esas que vuelven a aparecer sin pensarlo ni una vez. He dejado de mirarte con esos ojos de amor, que utilizaba antes para ganarme un poco, aunque sea una parte de tu corazón. Te amé como tu me amaste, era amor mutuo, puro y real; pero algo dentro nuestro dejó de funcionar, y hoy por fin, lo pude superar...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario